Hay momentos de nuestra existencia que despertamos, nos paramos y notamos que permanecemos en el mismo camino mientras la mayoría va por otro y nos llevan mucha ventaja; este es el momento primordial en el que debemos parar la marcha y analizar toda la estructura de esta situación, normalmente aquí estamos como el átomo, rodeados de protones, electrones y toda una serie de energías; para nuestro entendimiento serian letras y números que giran a nuestro alrededor que debemos unir en palabras, frases, oraciones, párrafos y cifras que al unirlas nos darían soluciones momentáneas y duraderas, para utilizarlas en el camino logrando avanzar y desplazar o sobrepasar a unos cuantos de los otros caminos.

Descubriendo y analizando todos los detalles que son como un examen oftalmológico de campo visual se puede lograr el éxito con poco esfuerzo y una gran sabiduría, desarrollando la inteligencia que puede convertir estos detalles en grandes oportunidades de avance en diferentes ramas de nuestra vida. Cuando suena una alarma es un aviso de que algo hay en el ambiente y hace falta una profunda reflexión.

Somos excelentes consumidores de cualquier cosa: regalos, beneficios, enfermedades, problemas, modas, palabras, números, empleos, ropas, zapatos entre otros, pero todo se distorsiona por falta de control sobre estos consumos, el principal obstáculo tiene su base en la curiosidad y debido a esta quedamos: rezagados, bloqueados y sin esperanzas, por culpa de malas elecciones, hay veces que la belleza tapa mucha fealdad, pero esa belleza nos deja deslumbrados y sin opciones, hay que cerrar los ojos y ver más profundamente ante todo lo que está al nivel de nuestra visión, para que los ojos no se irriten y opaquen y nuestra mente pueda ver la realidad.

Es difícil pero no imposible con tacto, astucia y una óptima orientación se puede lograr. Siempre recorremos una calle a la vez, no dos, ni tres, una a la vez y nos vamos a encontrar muchas cosas al doblar cada esquina, que nos van a exigir dar el siguiente paso, la alegría se difumina por nuestro cuerpo cuando llegamos a cada esquina, porque son metas logradas, es imprescindible conquistar cada una para sentir la satisfacción de la realización de los sueños, nunca dejarlos a la mitad, porque eso nos resta energías.

Miguel Correa.