Son expertos fingiendo, su personalidad es bipolar, se relacionan con los eclesiásticos, hipócritas de nacimiento, agasajan a los políticos de todas las tendencias de acuerdo al momento, para luego darles la estocada final cuando tienen la confianza de estos, se humillan ante los poderosos buscando su amistad y complacencia y tiranizan a los de condición humilde, aunque a veces les hacen promesas de ayudas para que soporten la carga y mantengan las esperanzas en futuros tiempos mejores.

¡Son diabólicos, demonios desatados y conspiradores del averno ¡

Una de las más importantes e inspiradas metas es la convicción de que somos importantes para nosotros mismos y para alguien, el deseo de pertenecer, convencer y ser imprescindibles; esta pertenencia nos motiva a planificar, desarrollar, crear y compartir objetivos que nos hacen y harán personas amadas, idolatradas y copiadas; es primordial dejar un buen legado sobre todo a nuestros hijos y demás descendientes.

Las experticias de la vida transcurrida, nos pueden dar conclusiones y actuaciones para la vida futura, hay momentos en que nos sumergimos en una oscuridad promovida e inspirada por otros, producto de ideas antiguas ya exorcizadas y que volvemos a utilizar, los espanta sueños como esbirros del infortunio quieren ser los capitanes de todos los destinos sin la oportunidad de posibles escalas de preparación a mejores futuros y arrastran en su barahúnda a los que les permiten entrar en todos sus sueños; la sensibilidad de los habitantes comunes y corrientes queda exprimida y exterminada con la aplicación de tantas normas de comportamiento y las acciones libres quedan en el olvido de las comunidades, las que con su extrema inocencia creyeron en las utopías del viento y confiaron en un futuro promisorio, sin darse cuenta que los adornos que exponía ese futuro eran solo quimeras.

Tenemos una nueva misión inquietante, aguda, intensa y violenta, ya que entramos a vivir en el club de extranjeros en su propio país, se escapa de nuestras manos y nos encontramos orbitando alrededor de nuestro terruño con grandes prohibiciones que oprimen nuestro intelecto, nuestras inquietudes opacan las voces y los lamentos, crecen con furia, atraviesan el espacio para ir a chocar con la lluvia tormentosa y luego caer en el pozo del olvido de un nuevo orden mundial, que estremece con ahínco las ideas de los pueblos y así se van comprimiendo en la caja de las sorpresas.

Los pasos interminables se confunden en las calles, unos se asocian, otros se separan y se odian, algunos se abrazan con amor y la lujuria los absorbe, pero son pazos de gente normal que mantiene la esperanza de una vida feliz.

Las ideas más inquebrantables ceden terreno a la presión de los guardianes de la mentira que vienen con sus caras largas a torturar cuerpos y mentes con su fanatismo estrafalario y exacerbado hasta que llegan a los bolsillos de la plebe, que los acepta con mucho miedo y conformismo, aceptación que se presenta adornada con regalos miserables que solo duran el momento en que el agua se escurre entre dos manos y que se evapora entre parpadeos de segundos, es una alegría momentánea que hace rivalidad con los suspiros de una comunidad torturada por los obstáculos y los rompecabezas.

Las sombras se van cerniendo sobre las cabezas de este pueblo empequeñeciendo sus imágenes, pero aún mantienen la frente alta esperando que el desenlace de los hechos les sea beneficioso y que el cambio de horizontes les llegue con prontitud.

Miguel Correa.