No
sé quién ha notado que cada vez que amanece, la cama no está en el mismo sitio,
porque se ha desplazado poco o mucho, dependiendo del sueño que tengamos, si
amanece cerca de la puerta es que viajamos mucho.
Recuerdo
una vez que soñé que iba en un barco y no salía del banco de algas, estaba
enredado y golpeaba a las algas, pero no había movimiento, cuando desperté, la
cama buscaba salida por la puerta, pero por lo grande de la misma, estaba
atascado en la puerta, en otra oportunidad estaba sobre las nubes en una
avioneta, al despertar había roto los cristales de la ventana y la aguja no
cabía por el ojal, me desplace como pude y la volví a emparejar en su sitio
atornillada al piso.
En
otro sueño estaba trotando en el parque alrededor de la fuente y al despertar
los tornillos estaban doblados pero las tuercas conservaban su lugar, en otra
oportunidad hacia el amor a una yegua y cuando desperté había un hueco en el
techo por las coces que recibí.
Por
ultimo cambie de cama y no he podido rescatar mis sueños.
Miguel Correa.
Si pudiésemos controlar los sueños seriamos unos genios.
ResponderEliminarQue terribles son los sueños, a veces nos sorprendemos por ellos.
ResponderEliminarSi aunque normalmente son deseos escondidos y reprimidos en nuestro subconsciente.
EliminarLos sueños son a veces maravillosos y otras veces terribles, hay que saberlos definir y controlarlos.
ResponderEliminarAsí es Norma.
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