Anoche en
una hora de claridad lunar después de haber pasado días sin transitar por los
caminos de mi mente y tras una corta meditación, ingerí un líquido oscuro
adobado con yerbas aromáticas y satinado con un polvo que me retaba a una
prueba, comencé un viaje que me llevo a navegar por mi masa encefálica, donde
disfrute con las clases magistrales que me eran dictadas por el fantasma rey
que habitaba la suite principal de mi cerebro, yo recibía las clases con suma
curiosidad e interés y hacia preguntas clave que estimulaban al líquido mágico
ingerido a provocar más éxtasis.
Había una división
entre dos parcelas o cerebros que la edad hacia mitológicos, ninguno sobresalía
más que el otro, ambos tenían algo que los hacia interesantes y provocaba pasar
una temporada de vacaciones en cada uno con sus consiguientes lujos y comodidades;
solo que para poder permanecer en alguno de los dos había que ingerir un trago
diario del líquido oscuro y mantener la curiosa lucidez de espíritu para lograr
los diferentes nirvanas, que entre los más importantes estaban: el sexual y el
de sabiduría, dependiendo de las necesidades individuales o colectivas de cada
quien.
De pronto
los dos cerebros emprendieron una carrera a través del tiempo en el cual
transitaron por las diferentes edades de la tierra: en una observaron personas
con poca vestimenta iniciando un fuego con el roce de dos rocas que después de
mucho esfuerzo pudieron comenzar, esto lo hacían para luego con gran esfuerzo
de caza apoderarse de animales para poder alimentarse; en otra edad vieron a
muchos ya con más ropaje cubriendo sus cuerpos, ayudarse unos a otros para
fabricar diferentes utensilios de utilidad, cubiertos para hacer más fácil el
placer de comer o armas para pelear con los enemigos y así poder subsistir, en
otra edad más reciente vieron personas que moraban en aposentos modernos y cómodos,
que casi chocaban unos con otros en su deambular por las calles de grandes
ciudades. Aquí comenzaron los problemas:
las luchas por territorio, envidias por las posesiones ajenas, guerras a
muerte por las mujeres más hermosas hasta entre hermanos, robos, corrupción,
despilfarro, placeres infinitos, expropiaciones, asesinatos: por poder, por
encargo o por placer, en fin, se podía hacer un libro con tantos esquemas de
comportamiento.
Veo a la
entrada del segundo cerebro un libro con muchas páginas que ríen con emoción y
se tuercen con lujuria sardónica. El libro comienza con el inicio de un amor
inenarrable, fantástico y enigmático que motiva a la pareja a parir una droga
que adormece y acelera las bajas y altas pasiones en un paroxismo satánico y angelical
fusionados en uno.
Las
extravagancias de la pasión mas desenfrenada colisionan con los pensamientos
exquisitos de la lujuria y se unen a través de sus sexos frenéticos y
desenfrenados, el lecho sexual se desmaterializa con la fuerza desbocada de
estos cuerpos en calor que son disimiles, pero se necesitan exotéricamente,
suben y bajan, pero son cobardes para separarse y mantienen la unión que los
llevara al nirvana de los sueños más libres y deseados desde los comienzos del
tiempo.
Hay un campo
de batalla en el primer cerebro, todo se ve desolado las opiniones son diversas
e individuales, todos quieren sobresalir y aparentar que no se está
desarrollando nada importante, cada quien monta su espectáculo tratando de ser
el mejor; una ligera explosión acelera el correr del líquido ingerido haciendo
todo moderno y vistoso, las neuronas entran en ebullición retando a los dos
hemisferios a una pelea sin armas, donde los pensamientos son reyes y hacen que
la lucha sea mágica, misteriosa y atractiva a las ideas expuestas por los dos
contendientes.
Filosóficamente
existe un trecho largo entre estos dos contendientes que dependen del
desenvolvimiento de cada uno de los hemisferios y los comodines que esperan el
fin de la contienda para pegarse como garrapatas al triunfador y chuparle el
sudor hasta la saciedad; desde los comienzos de la humanidad esto ha sido ley y
se han establecido estos parámetros de convivencia, el mundo ha estado siempre
dividido entre hormigas y garrapatas, unos tratando siempre de mejorar y hacer
brotar frutos y los otros los que promueven fantasías, los que satisfacen sus
necesidades con la sangre y el sudor ajenos, los que se pegan sin querer salir
de la teta que les da leche, las garrapatas del mal vivir, que venden sus
mentes y desechan la satisfacción de esforzarse para lograr y concluir con amor
la labor que satisfaga a todos.
Total, que
el viaje termino porque se me olvido ingerir líquido y continuar con la secuencia
lo que me hizo despertar hasta otra oportunidad en que ingiera el preciado elixir
y continúe mi viaje en el tiempo. Miguel Correa.
Los escondrijos de la mente siempre albergan incógnitas que analizar, descifrar y superar.
ResponderEliminarSi hay muchos que han sido investigados, donde se han descubiertos muchos acertijos con respuesta otros han quedado sin la misma.
EliminarSiempre han habido grandes misterios desde que comenzó el mundo, algunos han sido descifrados otros permanecen en el limbo de la mente.
ResponderEliminarLa mente es amplia, misteriosa, alberga infinidad de preguntas y respuestas, que han sido analizadas hasta el cansancio, han colaborado en el descubrimiento de multitud de descubrimientos científicos útiles a la humanidad, otros todavía permanecen en investigación y otros aun no han sido descubiertos.
EliminarMisterios-Mente es un gran acertijo que hay que descifrar.
ResponderEliminarMuy filosofico, pero se nota como la mente produce, imagina, inventa y descifra misterios.
ResponderEliminarMuy cierto.
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