En nuestra
larga o corta vida vivimos muchas e interesantes etapas, donde regularmente
vivimos de ilusiones, deseos, ideas, vivimos lo real y lo irreal, hacemos cosas
que disfrutamos y otras no tanto, creemos en cosas extraordinarias, en
fantasmas, seres mitológicos y fenómenos de otros mundos, en vida después de la
muerte, en personas o ellas creen en nosotros, vemos como algo cierto la
existencia de: dios, el cielo, el infierno y el paraíso; cometemos errores,
creamos o destruimos, nos aman o nos odian, amamos u odiamos, fabricamos
distracciones, poder, delincuencia, comunidades, pueblos, dinero, maldad y felicidad,
nos trazamos metas de diferentes índole que cumplimos o no, dependiendo del
estado de ánimo, las mismas son tan placenteras que muchas veces las repetimos.
Las etapas
son variopintas las más importantes son:
La niñez,
que es la etapa del descubrimiento y va desde el nacimiento hasta los diez
años, allí tenemos el amor excesivo de los padres y familiares, aunque algunos
no lo tienen, damos los primeros pasos en la educación, nos vamos adaptando a
comidas, bebidas, dulces y a todo lo que nos den nuestros padres, ya sea por
antojo propio o impuesto, disfrutamos con el día de cumpleaños y esperamos con
ansia los regalos, en la niñez los días más esperados por todos son los
navideños por: el niño Jesús, las hallacas, el pan de jamón, las tortas, en
general toda la comida navideña; en esta etapa los que tienen el amor de unos
buenos padres pueden llegar a ser personas importantes como el caso de Thomas
Alva Edison, que del colegio le enviaron una nota a su madre donde decía que el niño era lo
peor y su madre se la leyó cambiando las palabras, exaltando y elogiando a
Thomas y ya sabemos lo que resulto de esto, aquí notamos que dependiendo del
trato que nos den en esta etapa el mismo moldea toda nuestra conducta y
personalidad individual futuras. En esta etapa se fomentan los celos entre
hermanos por el amor de los padres o por las posesiones que tenemos y no
queremos compartir, se idolatra a la madre o al padre y queremos imitarlos. La música,
la televisión, la radio, los libros, cuadros y los lápices para escribir nos
atraen con fuerza, la curiosidad por todo lo existente es ampliamente notoria.
La adolescencia
que va desde los diez años hasta aproximadamente los veinticinco, esta etapa es
sumamente complicada ya que en ellas se presentan las relaciones humanas, las
influencias externas e internas, el desarrollo y culminación de una profesión
especifica o no, la diversión extrema, la copia de ídolos, llegan los amigos y
amigas, las afinidades individuales o compartidas, vamos adquiriendo o
exigiendo libertad, expresamos con energía o pasivamente nuestras ideas,
gustos, deseos, metas, el carácter se hace más sólido, en esta etapa se nota
quienes van a ocupar las diferentes posiciones en la vida; en esta etapa hay
una transición es como si pasáramos a otra dimensión, es cuando la fantasía
adquiere otra rumbo y otra perspectiva, llega el amor fugaz o perenne, se establece
un ritmo variado y constante entre la felicidad y la decepción, la música con
sus diferentes variantes, el cine, los paseos con amigos y amigas, forman parte de nuestra
existencia, nos produce mucha curiosidad viajar para conocer otros lugares y
otras personas, los deportes entran con fuerza en nuestras vidas para quedarse.
La madurez
que va de los veinticinco hasta los sesenta, aquí experimentamos y se
desarrolla el deseo de convivir en pareja, reproducirse y formarse como padres
o madres, pasamos a formar parte de una empresa propia o ajena después de haber
obtenido una profesión o no, se consolidan las relaciones de amistad, de
convivencia, de unión familiar, vemos y asistimos el crecimiento de nuestros
hijos y queremos lo mejor para ellos y por ende para nosotros, buscamos un buen
entorno para vivir y desarrollarnos; aunque esta etapa es muy complicada para
algunos que eligen caminos pedregosos en materia política y religiosa. Esta
etapa es la de las costumbres: a personas, doctrinas, objetos y formas de vida,
donde las mismas pueden moldear nuestro entorno hacia el bien o hacia el mal.
Y la que va
de los sesenta hasta donde lleguemos que puede ser corta o larga dependiendo de
las circunstancias, esta etapa es llamada vulgarmente tercera edad y muchos
consideran que, por las personas estar inmersas en esta etapa y arrastrar esta
gran cantidad de años ya son desechables e improductivos, por lo tanto, hay que
apartarlos a un lado o utilizarlos para que se encarguen del cuido de los
nietos, que ideas tan absurdas ya que la vejez está alojada en una parte del
cerebro y sale a la luz cuando es invocada por la misma persona o familiares
que ven a estas personas como artículo de fastidio y de molestia. Hay que tener
presente que muchas personas inmersas en esta etapa han hecho grandes
descubrimientos que han beneficiado a toda la humanidad, muchos se niegan a
formar parte del clan de los inactivos y se mantienen ocupados en algo que les
brinda satisfacción y orgullo, produciendo para su sustento y el de otros.
También hay que hacer notar que muchos se hacen impertinentes, melodramáticos y
otros entran en el nefasto mundo de las enfermedades seniles, pero normalmente
los que han vivido una vida positiva y feliz, en esta etapa continuaran
disfrutando de esa vida.
Esto es un
pequeño análisis de las etapas más importantes que vivimos a lo largo o corto
de nuestra vida. Miguel Correa.
En nuestra vida pasamos por diferentes ciclos, los cuales son como una nave, donde somos los pilotos y la clave es saberla manejar para que sea la mas optima posible.
ResponderEliminarTodo es cuestion de tener claro en que etapa de nuestra vida estamos y vivir una a una ..
ResponderEliminarAsí es¡
EliminarMaravilloso, todas las etapas hay que vivirlas a plenitud.
ResponderEliminarClaro¡
EliminarSiempre hay que analizar todas las situaciones que se presentan para que la vida sea mas placentera, util y feliz.
ResponderEliminarAsí es¡
EliminarMuy bueno todas las etapas son maravillosas, hay que disfrutarlas.
ResponderEliminarAsi es.
Eliminar