¿Saben
cuál es la importancia de una pared o la vergüenza de un pañuelo? La pared tapa
la fealdad de tus acciones ante los ojos verdugos, cubre los sexos apasionados
en plena vorágine huracanada, si se une con otra oculta conversaciones aduladoras
y peligrosas como las politiqueras, la pared empequeñece el espacio que ocupas;
cuando son cuatro encierran tus pensamientos, las paredes controlan
conversaciones, las recrudecen o adulteran; las paredes son cómplices que se
confabulan y aferran a las conspiraciones, las hacen indoloras, y solo hacen daño
cuando escapan de su control.
El
pañuelo seduce a tus labios, seca tus fluidos ante las narices ajenas, hace
atractivas a tus feromonas, tapa exclamaciones dolorosas, atrapa en sus redes
los sueños bufones de tus dedos, impide por momentos el brillo deslumbrante de
unos ojos femeninos que miran sin mirar y también alegran con su perfume la faz
de una venus en calor, el pañuelo disfraza los deseos y los hace misteriosos,
el pañuelo hace proliferar las burlas venenosas y las hace burlescas.
A
simple vista notamos que la pared y el pañuelo son casi hermanos; ambos cubren
y disfrazan conciencias, a veces te protegen de las inclemencias de los
elementos, te ayudan a pasar inadvertido, también te sirven para señalizar y
construir planes, ocultarte de los enemigos, bloquean tus fluidos, encierran
tus demonios y fantasmas y cuando son coloridos y vistosos estimulan las
criticas.
Si
tapas tus oídos tus ideas se disipan, si colocas un techo en tu azotea sucede
lo mismo, trata ante todo de sentir las palabras, tocar las voces que están en
el viento, aspirar los pasos de la tierra, estimular las lenguas a escuchar tus
versos y grabar en las mentes tus ideas, pensamientos y motivos, ¡así serás un
deseo interminable ¡ Miguel Correa.
Bravo una escritura profunda que debería llegar a todas las mentes.
ResponderEliminarCon ficción se pueden hacer y denunciar muchas cosas importantes para todos.
EliminarUna clase magistral de conocimientos.
ResponderEliminarGracias amiga Norma siempre a tu orden.
EliminarHermoso!....
ResponderEliminarGracias Selva.
EliminarPero las paredes muchas veces protegen lo mejor que tenemos, cuidan del desamor y el desamparo, preservan de la envidia y los vampiros humanos....las paredes muchas veces resguardan lo mejor que somos para que no nos sigan despojando....no siempre se está tan en óptimas condiciones para seguir amando y cuando debemos introvertirnos para fortalecer nuestro ardid allí están mis cuatro paredes pintadas de color índigo con mis ventanales rojos para que no pase el mal, el frio y el desamor...
ResponderEliminarAsí es las paredes son testigos silenciosos de nuestros sentimientos, brillan cuando estamos alegres y se oscurecen cuando estamos tristes, son como una madre cuidando a sus hijos cubriéndolos siempre de amor.
EliminarUn pañuelo envuelve tus misterios y las paredes los encierran en un mutismo silencioso, el pañuelo los cubre de voluptuosidad y las paredes controlan su avance, hasta que consigan un orificio por donde dar rienda suelta a su apoteosis.
ResponderEliminarAnalizando profundamente esta escritura llegue a la conclusión de que es totalmente cierto.
ResponderEliminarSi mi amiga, siempre hemos buscado algo que nos mantenga semi ocultos ante las inclemencias y las paredes y los pañuelos tienen esa potestad.
ResponderEliminarUn excelente cuento¡
ResponderEliminarGracias¡
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