¡ESPERANZA¡

     “Esperanza tu llegaste a mí al yo nacer, te he estado narrando grandes, pequeñas, alegres y tristes historias, te he ocupado tu tiempo con mis tonterías, no sé si me has escuchado por amistad por fastidio o por deleite, lo ideal es que te escriba una historia nuestra que nos pertenezca, que nos alegre, nos motive y cubra totalmente el espacio que ocupamos.

    El tiempo inexorable abrió tus alas y cubrió mi figura, llegaste a mi alumbrándome voluptuosamente, llenando mi espacio con matices de candor y belleza.

       Yo extendí para ti mis brazos cubiertos de alegría y anhelos, mientras tu Esperanza llenabas los momentos precisos de mis presentes con animación y entretenimiento.

     Cuando te descubrí honrabas tu destino con destellos de confianza y optimismo, aun lo haces, no sé cómo eres tan fiel a tu génesis, aunque a tu alrededor se desploman tantos gérmenes lujuriosos, credos y doctrinas de ultratumba.

      Tu fe levanta arboles hacia el infinito celestial y opaca hasta las estrellas, tus deseos florecen y cubren con mantos fluorescentes todas las angustias y melancolías del hemisferio terrestre, tus pensamientos primaverales alumbran y extinguen el infierno de los mitos, con dulzura y amor.

     Sonriente tocabas la brisa que acariciaba los rostros, convertías la sierpe en espigas de trigo, el estiércol a tu paso crecía como palmeras mitológicas, la oscuridad se hacía brillante y alumbraba a la luna, tus labios llegaban sin obstáculo a todos los oyentes, los ídolos y estatuas se arrodillaban a tu paso y pedían perdón.

  Yo siempre admire tu sagacidad, tu magnanimidad, tu voluntad inquebrantable, tu excesiva belleza de espíritu, tu temple amazónico y tu espíritu de conquistadora.

       Fuiste una luciérnaga eterna que alumbro mis pasos, estableciendo orden en las entradas y salidas cerebrales, como una madre a su retoño, como un árbol a sus ramas y flores.

       Implantaste una alarma en cada desvió, en cada escalera, en cada bajada antes de llegar al piso, en cada carrera desbocada, en cada tormenta, en cada espina nocturna y en todas las vertientes del pasado y el presente para desembocar en un futuro excelente.

     Te muestras comprensiva a pesar de los avatares, paralizas los dardos para que no continúen su maldad, muchos subestiman tu poder, pero al final caen vencidos, muestran su terrorífica dentadura y tu sonrisa los hace pedazos.

      Tienes el don de la bondad infinita, la pureza de pensamiento, la luz de tus ojos adormece las pasiones, la música que sale de tus labios calma a todos los espíritus del mundo.

      Esperanza te idolatro y te venero, quiero adorarte y llegar a la mansión de tu alma, enfrentar contigo pasiones exquisitas nunca antes probadas, enfrentar el presente y el futuro unidos en un horizonte mitológico con el poder suficiente para doblegar al pasado y fundir en un holocausto todas las mentiras y quimeras que han dejado en el camino los malos profetas del tiempo.

    La naturaleza humana con sus garras implacables trata de descubrir tu misterio y domar tu confianza, mas no puede, tú con solo reír al segundo, al minuto y a la hora consigues en fracciones lo que a muchos le ha demorado años.

     Esperanza te nombro y te amo, te pienso y te concibo, te oigo y soy feliz, te recuerdo y avanzo, pienso que soy y tú lo afirmas, mi infinito llega a mí en un instante cuando pasas por mi mente, la oscuridad se llena de brillo y la realidad se manifiesta.

  Esperanza siempre he admirado en ti el proceso de transformación misterioso y mágico que te ocurre cuando pasas de ser una frágil y temblorosa oruga que arrastra su destino por un sendero peligroso y hostil a formarte por medio de una metamorfosis evolutiva en una flamante y vigorosa mariposa que va extendiendo sus nacientes alas en una explosión de colores que hasta la naturaleza te envidia.

    Con tu al principio torpe pero seguro vuelo vas adentrándote en el horizonte conquistando sueños y quimeras haciendo el deleite de miradas infantiles y otras que usurpan la dirección de esos alegres ocelos.

    Esperanza es el nombre de una de las tres virtudes teologales, juntamente con la fe y la caridad. Por eso tu inspiras en mis tantos deseos, tantas pasiones, al nombrarte se desliza a través del tiempo y el espacio la magia de un presente infinito que se enlaza a un futuro de fantasía y perspectivas de grandezas, porque es lo que espero de ti, la más grande satisfacción nunca antes sentida.

    Esperanza tu desintegras la desconfianza y la llevas a su mínima expresión, la desesperanza desaparece en el canto de tus vocales, conviertes las quimeras en historia, los mitos se hacen realidad en las manos y mentes de los ilusos.

    Esperanza, cuando aprendo algo me siento como un coloso, pero cuando lo pierdo me siento como una hormiga.

         Ayer aprendí a mirarme en tus ojos

         Ayer aprendí a respirar con tu aliento

         Ayer aprendí a besarme en tus labios

         Ayer aprendí a oír con tus sonidos armónicos

         Ayer aprendí a sentirme dentro de ti con una cadencia astronómica

         Ayer aprendí a pensar en ti

         Ayer vi todo lo esplendoroso de tu cuerpo proverbial

         Ayer transformé mis sensaciones alegóricas, las hice objetivas

         Ayer bese la aurora en primavera

         Ayer sentí el anochecer bajo el sol

         Ayer deguste la miel de tu amor

  Hoy entendí el canto de las aves, la alegría de los árboles, el zumbido del viento, el llanto de los niños, la apasionante conquista de los ríos a su paso, su alianza con los mares y el volcán que explosiona cuando se unen las pasiones.

  Eres parte de mi ser y ayer aprendí en toda su intensidad la falta que me hace, esa parte de mi ser y hoy ya sé que eso es el amor. 

2054+1. Miguel Correa